Algunas personas me preguntan porque quiero tanto a
Sevilla, y yo les contesto, no puedo dejar de volver los ojos a esa tierra donde
nací, el corazón se me aprieta y una ola de amargura llega a mi cerebro, porque
muchos recuerdos, tratan de taladrarme el alma.
A veces quisiera sentarme en el parque y comerme un bistec con un delicioso café
Ginebra, sin ser perseguido por nadie, ni siquiera por las turbas de amigos aduladores y así poder expresar: “oh
sana libertad, jamás tendremos con que pagar tus caricias, he sentido tus besos
en mi frente”.
También, he
descubierto que es un gran error tomar demasiadas precauciones en la vida, pues
cuando el destino se rebota, las echa a perder en un instante.
Vivir en sobriedad y mesura, no complicar la vida,
hacerla fácil para todos, este es el secreto de la dicha y la grandeza de los pueblos. Seguir las leyes
sabias y comprender que, “la
beneficencia envía al enfermo una camilla, la filantropía se acerca a el y la caridad le da la mano”.
Sevilla es un pueblo en donde, 500 personas piensan
por sí mismas, las demás piensan por cuenta del vecino y la gran mayoría no
piensan de manera alguna, esta última es la más numerosa.
Algunos de nuestros escritores y periodistas, han
perdido la iniciativa y su sagrada libertad, convirtiéndose en lacayos de la
opinión.
Me han informado que en mi pueblo es muy fácil
congraciar con las mujeres jóvenes e imposible resistir el carácter de las veteranas,
que además, las personas que se han tratado largo tiempo y que parecen
estimarse, “una nimiedad”, les hace romper esa gran amistad y llegan
incluso a odiarse.
Los políticos se la pasan injuriándose entre ellos
mismos, sin que el pueblo advierta siquiera su presencia.
No obstante, he encontrado que Sevilla ha sido cuna de
inspirados poetas, excelentes escritores y brillantes hombres de teatro, aunque no ha tenido
connotados filósofos, sus costumbres son puras y algunos se han destacado como hombres de ciencia, entre ellos,
eminentes médicos.
Nosotros los egresados del colegio, no deberíamos olvidar el legado que nos han dejado Inglaterra,
España y Francia con esa abundante y
rica literatura, Grecia y Alemania con su alta filosofía, lo
mismo que ese espléndido arte, con que
ha brillado Italia.
Me comentan que en Francia, el número de librerías es
asombroso, que incluso muchas veces hay que hacer grandes colas para adquirir un
libro y generalmente las personas que atienden, les hablan a los
lectores, sobre las últimas producciones
literarias, con un acierto y sagacidad
sorprendentes.
Tengo entendido que en mi pueblo contamos con una
buena Biblioteca y gozamos de
una hermosa y muy bien dotada Casa de la Cultura, las cuales
últimamente han estado muy activas,
pronto tendré la oportunidad de visitarlas.
Algunos opinan que a nosotros los sevillanos se nos ha
venido acabando el instinto vital, que somos decadentes, que todavía creemos
que el
bien y la verdad, se buscan por sí solas, esa razón nos impide encontrar
el cambio y que además los políticos nos han dejado impotentes.
Se nos ha olvidado que cuando todo se descompone y los
cuervos empiezan a revolotear sobre la carne podrida, se hace necesario atajar
la gangrena con un bisturí, hay que cortarla.
Hoy por hoy, lo que vislumbramos para el futuro, no
tiene nada de prometedor, si no nos sacudimos ese adormecimiento, veremos los
campos desecados, hombres hambrientos, el nepotismo dictando órdenes, la
injusticia erigida en sistema, la frivolidad soltando carcajadas estúpidas,
además de una mezquina política, envenenando las inteligencias más altas y los
más nobles caracteres.
Se nos hace cada día más inaudito que en el mundo
existan gobernantes déspotas hablándoles de libertad a sus pueblos. Lo mismo ocurría en la
antigüedad, Tiberio, Calígula, Nerón, Hitler y Stalin, estos monstruos,
vergüenza del ser humano, fueron excelentes personas antes de subir al trono.
Pero mi consejo es que debemos ser estoicos,
como lo fuera en su época Seneca, fuertes de carácter ante la adversidad y el
dolor, evitando que el engaño siga haciendo de nosotros, “sus victimas”.
Por| Abelardo Giraldo 06/25/15.
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