El hermeticismo, también llamado hermetismo viene de un conjunto de escritos atribuidos a Hermes
Trismegisto que quiere decir tres veces grande, porque para él, las tres partes
de la sabiduría eran la alquimia, la astrología y la teúrgia y que existió
entre la época de la reforma y la contrarreforma,
cuando Calvino y Lutero se rebelaron contra la santidad absoluta de los papas y
Santa Teresita de Jesús se le fue lanza en ristre en la contrarreforma.
Otros afirman que lo llamaban Trismegisto
porque, era el filósofo más grande, el sacerdote más grande y el rey más
grande.
Otros dicen que se llamaba así, por su alabanza a la santísima trinidad
de la cual afirmaba que había en ella una naturaleza divina.
Existió por los años de 1300 a 1600 después de Cristo.
Comentan los biógrafos que Isaac Newton, fincaba su fe en los siete
principios o leyes universales de la filosofía hermética.
La tríada hermética estaba constituida por tres elementos: Dios, Cosmos
y Hombre.
Los que formaban parte de esta corriente filosófica se caracterizaban
porque eran personajes entregados a la pedantería académica, aristotélicos,
positivistas o ilustrados.
Los principios son:
El bien es inalienable, es Dios mismo. Todo es mente, el universo es
mental.
El pensamiento ve todas las cosas, lo ojos solo las corpóreas.
Como es arriba es abajo, como es abajo es arriba.
Nada es inmóvil, todo se mueve, todo vibra. Todo está lleno de alma,
observemos como se mueven todas las cosas, unas alrededor del cielo, otras en
torno a la tierra.
Todo es doble, todo tiene dos polos, todo su par de opuestos, los
semejantes y los antagónicos son los mismos, los opuestos son idénticos en
naturaleza, pero diferentes en grados, los extremos se tocan, todas las
verdades no son absolutas.
Toda causa tiene un efecto y todo efecto tiene su causa, todo sucede de
acuerdo con la ley, la suerte no es más, que un nombre que se le da, a una ley
no conocida.
Todo fluye y refluye, todo tiene su avance y su retroceso, todo asciende
y todo desciende, todo se mueve como un péndulo, la medida de su movimiento a
la derecha es el mismo hacia la izquierda, esto se llama en esta filosofía, “Principio universal de la
compensación.”
Cuando aprendas todas estas cosas a la vez, los tiempos, los lugares,
las sustancias, lo mismo que sus cualidades y cantidades, podrás conocer el
infinito.
Abelardo Giraldo. 03/30/14.
Bibliografía, WIKIPEDIA.