Lo que ocasionó en agosto pasado, para que
intercambiaran fuego de artillería, se
debió a dos minas terrestres que fueron colocadas deliberadamente al paso de
una patrulla surcoreana, de la cual salieron heridos dos soldados, según denuncia
Seúl, pero Corea del Norte, niega esa acusación.
Corea del Norte, insiste en denunciar que los
ejercicios militares que se están llevando a cabo con la participación de miles
de tropas y el uso de equipo militar de última generación por parte de Estados
Unidos, no son más que los preparativos para una posible invasión.
Kim Jong Un, ordenó disparar dos misiles balísticos de
corto alcance al Mar del Norte, también conocido como el Mar de Japón, después
de criticar ferozmente los ejercicios militares.
En un sitio web del gobierno de Corea del Norte,
subieron un video a YouTube, en donde se registra un imaginario ataque con
misiles a la ciudad de Washington.
El año 2013, Pionyang
amenazó una guerra nuclear contra Corea del Sur y Estados Unidos, incluso
alcanzó a declarar que el armisticio, que
puso fin a la guerra de las dos coreas en 1953, ya no era válido.
Se tienen muy malos recuerdos de la guerra de Corea en 1950, en la que
fallecieron más de dos millones de personas.
En ocasiones anteriores, por ejemplo en 1968, Corea del Norte envió comandos en un intento fallido de
asesinar al presidente de Corea del Sur.
En 1983, un
atentado vinculado a Pionyang, mató a 17 altos funcionarios de Corea del Sur en una visita a Birmania.
En 1987, el Norte fue acusado de bombardear un avión
de Corea del Sur y el 26 marzo de 2010, un buque norcoreano atacó con un
torpedo partiendo en dos, el buque surcoreano Cheonan, dejando un saldo de 46 personas muertas, luego en noviembre
de ese mismo año, atacaron un isla llamada Yeonpyeng, habitada por 1600 personas
y le dispararon 50 obuses, destruyendo torres de energía y casas de pescadores,
dejando un saldo de 20 heridos y 4 surcoreanos muertos.
Corea del Sur contraatacó con 80 proyectiles de
artillería y sobrevoló la zona con
“cazas de combate”, pero debido al hermetismo con que Corea del Norte maneja
sus problemas, no se sabe el alcance de los destrozos.
Las amenazas surgen de lado y lado, Corea del Sur ha
manifestado que la infantería, la marina y las fuerzas aéreas, permanecerán
unidas para contraatacar con fuego múltiple y hacer que Corea del Norte no
vuelva a provocarlos otra vez.
A su vez, los
enemigos del Norte, aseguran que si los enemigos del Sur, se atreven a invadir sus
aguas territoriales, siquiera un
milímetro, el próximo objetivo sería Seúl y convertirían esa ciudad en un mar
de fuego, pronosticando además que, “La guerra nuclear empezaría en cualquier
momento”.
Analistas aseguran que lo que quiere Kim Yong Un, es hacer lo que hizo su padre en el pasado, llamar la atención de
Seúl y Washington, volver a la mesa de negociaciones, pues funcionó maravilloso
en el pasado, cuando empezaron a negociar el desarme nuclear y lograron
conseguir cuatro mil millones de dólares, en recursos provenientes de Estados
Unidos, Japón y Corea del Sur, más 3.400 millones de dólares, en ayuda
humanitaria de otros países.
Kin Jong Un, necesita más que
nunca petróleo y dinero para mantenerse en el poder y lo peligroso de esta
situación es que “se trata de una
dictadura con juguetes nucleares”.
Se trata de una sociedad muy cerrada, nada se sabe
sobre sus mercados, sus calles o la vida de sus gentes y lo único que se filtra
al extranjero es información sobre sus instalaciones atómicas, sus misiles y
sus programas balísticos.
En abril 25 de 2007, en una parada militar ante unas
100.000 personas, se filtró un video en donde las tropas marchaban triunfantes
con tambores de guerra y exhibiendo 48 misiles inmensos de cuatro tipos
diferentes.
Un científico norteamericano de nombre Siegfried Hecker, afirmó que el régimen
le había enseñado sus últimos avances y que pudo apreciar una planta nuclear
para enriquecimiento de uranio equipada con 2000 centrifugadoras.
En un artículo publicado por El Tiempo, quien consultó
este científico, afirma que “Quedo
Pasmado”, al ver la capacidad de esta planta, la cual goza de una
ultramoderna sala de control que parece de ciencia ficción.
El régimen quiere que el mundo, conozca que está
desarrollando armamento atómico. Parece demostrado que disponen de misiles que
pueden alcanzar a Corea del Sur y Japón,
sus principales enemigos en Asia.
Aseguran además que sus últimos modelos están en
condiciones de alcanzar objetivos militares norteamericanos, concretamente en
Alaska y Hawái.
La actual presidenta de Corea del Sur, la Señora Park Geun-Hye, posesionada el 25 de febrero
de 2013 y cuyo gobierno termina el 24 de febrero de 2018, manifiesta estar
preparada para cualquier eventualidad.
Por| Abelardo
Giraldo. 09/02/2015
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